
Lo acepto, yo soy una de esas personas que llaman “ninis”. ¿Por qué? No estudio y tampoco trabajo, más bien, estoy intentando sacar adelante una tesis que me está comiendo el cerebro. Pero ese es mi caso, tengo ex –compañeros que ya terminaron con su tesis ¿y saben qué? No tienen trabajo, nadie quieres dárselos, meten sus curriculums a varios lugares y no los llaman. Encima de todo, salen un par de pseudo-periodistas diciendo que la juventud es el problema…. ¡Error! Es el resultado del problema.
Hoy precisamente estaba hablando con mi prima, la cual también es ahora una “nini”, las dos tuvimos un trabajo del cual renunciamos. Ella daba clases de inglés y administraba una academia de idiomas, mientras que yo era editora de una revista de cine. No suena mal. El primer mes todo va bien, el segundo empiezas a notar como algo no marcha bien y el tercero abres los ojos.
A mí me contrataron precisamente para ser editora, increíblemente yo también escribía todos los artículos los cuales se modificaban a conveniencia de mi jefe… el caso es que no editaba nada en realidad. Pero no me molestaba ser escritora, más en los segundos meses me pusieron a hacer carteleras de cine para Mérida, Playa del Carmen y Monterrey. Entonces me pregunté ¿qué diablos tiene que ver esto con mi trabajo? También me entero que tengo una subjefa (la encargada de cobranza), que el jefe de diseño también es mi jefe, además de mi “gran jefe”… todos estos me daban órdenes… rompiendo el principio básico de la administración de empresas. Un día me avisan que tendré que hacer 32 carteleras de cine más, por el mismo sueldo. Eso fue la gota que derramó el vaso… renuncié por pura dignidad. Fui a la oficina de mi “gran jefe” y le dije de la forma más honesta posible: “No puedo, no tengo la facultad de hacer una revista y las miles de carteleras de cine”. Su respuesta fue: “Es que nadie más lo va a hacer, es tu trabajo” y así le contesté: “Entonces ya no quiero este trabajo”. La situación de mi prima fue similar, todo inició bien hasta que le cargaron más y más la mano haciendo su situación laboral se hizo insostenible. Les puedo asegurar que hay muchas personas que pasaron el mismo problema que mi prima y yo.

Tampoco es que sienta orgullo de mi escenario, pero el término “nini” simplemente es despectivo por muchas razones. Yo puedo decir que el próximo año cuando acabe mi tesis voy a buscar una maestría porque tengo posibilidades de recibir una beca, pero hay gente que no se encuentra en esta circunstancia; no podrá seguir estudiando porque no puede pagar una carrera, maestría, especialidad o lo que se les ocurra y tampoco tiene derecho a una beca.
¿Qué les queda? Trabajar. Más no todos tienen la suerte de conseguir un trabajo, por eso les mencioné que tengo amigos con licenciatura terminada que carecen de empleo. Ahora, si consigues uno, para muchos lamentablemente su situación termina como la mía o la de mi prima. Los jefes ven que trabajas bien, no obstante en lugar de apoyarte te sabotean con más y más trabajo, cuando podrían conseguir una persona de apoyo. Esto es por falta de educación, ¡sí de educación!… en un principio no tienen para contratar suficiente personal (lo entiendo, estamos en crisis), entonces consiguen a una persona, ven que es eficiente pero bajo su mentalidad capitalista en lugar de compartir sus ganancias piensan: “Si pudo con esto, no le afectará que le de más cosas para hacer”. La realidad es lo contrario, claro que afecta y mucho, no somos máquinas sino seres humanos.