100 malvados de película (parte 4)

Vi Desconocido (Unknown) y pensé: “ese protagonista es un hijo de la… "causa un caos a lo bestia” debería incluirlo en la lista por perdedor, pero mejor no. Lo mejor de ese filme fue la aparición de Hitler y Nixon, resultó que Hitler es más confiable que Nixon… siempre lo supe. Mejor continúo con la lista olvidada que trae un toque especialmente Nazi y racista

85. John Halder (Good – 2008) No es precisamente un villano, es más no es una mala persona, solamente un hombre ingenuo que lamentablemente comete el error de la negligencia. Él es un escritor alemán con una novela sobre la eutanasia. Su vida es un poco caótica porque se hace cargo de su madre enferma, su esposa que al parecer está absorta en la música y sus hijos. Entonces el partido Nazi se entusiasma con el escrito de Halder y le pide que haga un ensayo propagandístico a favor de la eutanasia. De ahí para adelante su vida parece mejorar tanto económicamente como amorosamente, pues vive en un lugar más lujoso y se vuelve a casar con una de sus estudiantes. Pero en el trascurso del nazismo, su amigo judío pierde sus derechos humanos y Halder no hace algo para evitarlo ya que no lo ayuda a tiempo; además de que termina apoyando sin saberlo la muerte de gente discapacitada, enfermos y judíos.

84. El Ku Klux Klan (Mississippi Burning - 1988)

Como son varios los personajes de esta película que cometen crímenes atroces contra los negros, los pongo en montón. Resulta que en Jesup, Mississippi matan a dos activistas judíos por ayudar a un chico negro, entonces el FBI acude a intentar resolver el caso. Los del Klan lo toman como una afrenta al orden por lo que toman medidas drásticas como quemar iglesias, golpear a las personas sin importar género ni edad al salir de misa (obviamente todas ellas afroamericanas), raptar gente e intimidar a cualquiera que estuviese en su contra. Para lograr atraparlos, los buenos (el FBI) tienen que tomar medidas drásticas igualmente, que van en contra de la ley.

83. Yuri Orlov (Lord of War – 2005)

Yuri, es un ukrianano hijo de un comerciante que huyó de la ex-Unión Soviética a Estados Unidos. Su familia tiene un restaurante que les ayuda a subsistir, pero Yuri se da cuenta de algo: que los gansters quieren armas y que precisamente las armas son en estos tiempos una necesidad vital, más que la comida. Por lo que se convierte en traficante, sin importarle el bando o el orden de jerarquías. Él le vende a todo el que pueda comprarle. Así termina haciendo un negocio con un tirano africano de Liberia llamado André Baptiste que intercambia diamantes por armas. Yuri, por supuesto acepta suministrarle todo lo que necesite Baptiste, aumentando así su fortuna; a pesar de darse cuenta que estos aparatos de guerra terminan incluso en manos de niños.

82. Bill “The Butcher” (Gangs of New York – 2002)

Nueva York en el siglo XIX era un caos (todavía es un desmadre), las pandillas gobernaban toda la ciudad y las peleas por el poder se daban en los famosos 5 puntos. El caso es que la pandilla de Bill "el carnicero", ganó el control de las demás bandas al derrotar a los Conejos Muertos (matarlos pues). Su ideología era no permitir que los extranjeros siguíesen proliferando, ya que Estados Unidos debía estar en manos de los nativos. Así pues, se genera un racismo constante contra todo lo fuereño, sobre todo si se trata de irlandeses y negros (pues por su causa van a morir infinidad de hombres en la guerra civil). Bill hace que el orden del caos se mantenga, asustando a todo Nueva York, sobornando a la “ley” y asesinando a quién haya que desaparecer.

81. Erik Dorf (Holocaust – 1978)

Ya empecé a romper con mis parámetros, porque Holocaust no es una película sino una mini-serie que bien podría pasar por un filme cinematográfico. Aquí actuó todo el mundo… no es cierto, pero si hubo muchas personas importantes como: Michael Moriarty, Meryl Streep, James Woods y Rosemary Harris.

Pero vayamos a Erik Dorf; él es como John Halder: un hombre alemán que no tiene nada que ver con el partido Nazi, su profesión es abogado, pero no le va muy bien. Consigue un trabajo para el gobierno y se une al partido, sin seguir su ideología ya que Dorf lo ve como un trabajo más. Pero después las cosas cambian, Dorf poco a poco va aceptando el nazismo empezando por no ayudar al doctor judío que atendió a su esposa, deportar personas, hasta llegar a ser uno de los principales creadores de los campos de concentración, así como las cámaras de gas (en las que no creo, pero ¡que diablos! en las películas no tengo queja).